Historia colaborativa

-¡No! ¡No conozco a ninguna diosa Linthi y eso que sé mucho de religiones y milogías de todo tipo! - dijo calcando casi literalmente su última intervención, con un tono molesto, como si lo hubiese repetido la misma frase varias veces ya

-Yo me encargó de la ignorante, abuelo -anuncio el joven atolondrado, sacando un cuchillo curvo, con una sonrisa macabra que dejaba al descubierto los dientes afilados, la marca de los canibales.

Achu imitó el gesto y la acción, con un suspiro, sus planes de hacerlo rapido y limpio se habían frustrado.

Pero ninguno de los dos contaba con los reflejos de Sofia. La chica agarró un florero que tenía a mano y lo lanzó directamente a la frente del joven, quien no tuvo tiempo de reaccionar. El chico cayó ante el fuerte golpe. Algunos fragmentos del jarrón destruido volaron hacia en rostro de Achu, incapacitandolo momentaneamente.

Sofia aprovechó el lapso para pasar entre los dos hombres y huir por la puerta por la que había entrado el joven. Luego la trabó fuertemente con una silla. Había conseguido un respiro.

(¡Eso! ¡Al diablo con las reglas! ¡Anarquía!)

Sofía tomo un momento para tomar aire, pero esos tipos tarde o temprano lograrían salir de ahí. Se preparó y salió del edificio en el que estaba.

Estaba otra vez en un lugar invernal y la nieve dificultaba la vista, pero no se sentía frio en absoluto. Era una especie de pequeña ciudad oculta.

Todas las personas usaban capucha y todas presentaban alguna característica animal.

Su querida ciudad, ahora asotada por la nieve.

En esos instantes recordo los reportajes de chicas desaparecidas misteriosamente durante los ultimos seis meses.

¡La preocupación por la tormenta le había hecho olvidar algo tan importante y había dado con los culpables! ¡Necesitaba a la policia! ¡Pero con la tormenta empeorando las calles estaban desiertas!

Tenía mucha información que procesar, pero lo primero era guarecerse, las calles estaban impracticables con ese clima, ¿Se arriesgaba a tentar la hospitalidad de otro habitante o se quedaba expuesta a la intemperie?

Sofia recordó un puesto de policia que quedaba a unas cuadras y hacia alli se diriguió. Encontraría refugio y podría hacer la denuncia.

Pero a los pocos metros, un fuerte viento soplo y la arrancó del suelo.

Sofia rodó y rodó hasta que...

...salió despedida y cruzó por el hueco de una ventana. Convirtiendo la persiana de madera en astillas y el cristal en añicos.

Tres días despues Sofia despertó en el hospital y aviso a la policia sobre el anciano y el joven canibal, pero ellos ya se habían dado a la fuga.

En su tiempo hospitalizada, una sola cosaa le daba vueltas por la cabeza. La diosa Linthi...